Ana María Cores en un monólogo de gran fuerza dramática y humorAna María Cores es en escena una mujer que vela a su marido en coma. Una situación que lleva a la actriz a profundizar distintas facetas del universo femenino, siempre con una gran fuerza dramática, con mucho humor y lirismo.
Los límites de este trabajo fueron determinados por la arquitectura del Salón Dorado y las decisiones de puesta en escena, dinámica y cambiante, tanto en registros de actuación como en desplazamientos horizontales y verticales.
En cuanto a la sala, por tratarse de un edificio protegido cualquier equipamiento que se utilice deberá estar fijado a los tramos que se previeron a tales efectos, esto implica un desafío en cuanto a los ángulos de iluminación que se logran y a la convivencia entre un sistema como el mencionado y el estilo arquitectónico.
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